El domingo 14 de marzo, se produjo un nuevo desembarco de tropas de la Policía Federal en nuestra Ciudad. Esta vez, mientras se espera la llegada de un nuevo contingente, llegaron 300 hombres equipados con 12 camionetas, 10 motos y 2 tanquetas, que se suman a las Fuerzas Represivas Nacionales de Gendarmería y la Prefectura ya presentes y que constituyen una profundización de la militarización de la ciudad, en la publicitada e ineficaz "lucha" contra la inseguridad y el crimen organizado.
Crimen organizado que precisamente es manejado y controlado por estas mismas fuerzas, con la participación de políticos, fiscales y jueces que son parte activa del negocio criminal.
Las recientes denuncias que involucran al Senador Provincial por el PJ Armando Traferri y a los fiscales Patricio Serjal y Gustavo Ponce Asahad, ambos procesados, en la protección al juego clandestino, entre otras actividades ilícitas que incluyen la trata de personas, el contrabando de cereales y el narco, más los audios difundidos del represor Maximiliano Pullaro, ex Ministro de Seguridad durante el Gobierno Socialista y del Senador de la UCR Lisandro Enrico donde le aseguran protección al ex jefe de drogas peligrosas Alejandro Druetta, condenado a 10 años de prisión, demuestran sobradamente que la inseguridad y el crimen organizado tiene en el entramado del poder estatal su punto de partida.
Todo el mundo comprende que cuando el delito se extiende y alcanza las proporciones que hoy azotan a nuestra ciudad y la provincia, es imposible la existencia del mismo sin la complicidad y participación del aparato estatal.
De aquí que denunciamos que más policías es más inseguridad, más balaceras y represión en las barriadas populares.
Rosario no necesita más policías. Necesita más trabajo, viviendas, escuelas, salarios dignos, poner fin a los desalojos con el objetivo de favorecer a los especuladores inmobiliarios y asegurar trabajo, salud y educación para las miles de familias que viven en la pobreza.
Sin resolver estos problemas no habrá ni Paz ni Orden, como proclamaba Perotti durante la campaña electoral, y mucho menos si esto se piensa resolver con las fuerzas represivas.
Desde la Coordinadora Antirrepresiva Rosario llamamos al conjunto de las organizaciones políticas, sindicales y sociales a enfrentar la creciente militarización de nuestra ciudad, militarización que es la continuidad de los acuerdos suscritos entre los Socialistas y Macri.
Nadie debería olvidar que en los cementerios también rigen La Paz y el Orden.
Coordinadora Antirrepresiva Rosario
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