Cuando pienso en Rodolfo pienso en que respuesta tendría
para la realidad tan compleja de hoy y en vez de tener certezas tengo más
preguntas y creo que eso es debido a lo consecuente que fue en su vida, por ahí
leí que tardo quince años de pasar del nacionalismo a la izquierda, y la verdad
que asumir esa transformación es digna de un ser humano maravilloso que asume
eso de la crítica y la autocritica para avanzar.
Hoy a 43 años de su desaparición a manos de una manga de facinerosos muchos se han adaptado y son pocos los que siguen levantando la bandera de la liberación, hoy nos quieren vender que hay un capitalismo humano o al menos serio, ¿Qué diría Rodolfo de esto?, me cuesta creer que estaría junto a los popes del consumo que necesita el sistema.
Me lo imagino denunciando el gatillo fácil y no sentado
en algún despacho de esos donde se cocinan las grandes decisiones, me lo
imagino visitando al MOCASE o junto a Norita cada jueves en la ronda, lo veo
caminando por Matanza hablando con la familia de Luciano Arruga, ahí lo veo
claro y comprometido.
No es novedad que estaría escribiendo, claro está que no
sería como los mediocres que hoy hacen policiales, , quizás fuera parte de
algún medio alternativo, comunitario y popular de esos que son tan necesarios y
que no abundan, ya no escribiría cartas sino mails o a lo mejor si para
mantener esa magia intacta de lo intimo que es una carta a la vieja usanza,
probablemente hubiera apoyado la ley de servicios de comunicación audiovisual
Pensemos por un instante la vigilancia que padecemos hoy:
cámaras, celulares, computadoras, drones y demás aparatos, ahí nos quedamos sin
respuesta porque si hubo alguien que manejo la inteligencia fue Rodolfo y hoy
es un tema difícil de abordar y es ahí cuando se nota su ausencia para resolver
estos asuntos, si fue capaz de descubrir una invasión seguramente resolvería
esto que tanto preocupa.
Pero Rodolfo no está y nos guste o no, no va a estar más,
por lo tanto o vivimos en el lamento o lo llevamos a la acción, debemos
entender que la mejor manera de que Rodolfo este presente es seguir levantando
su bandera, sus principios y su consecuencia, Rodolfo debe vivir en cada uno de
nosotros, organizándonos, escribiendo y militando como no lo querían a él, eso
les va a doler, que su lucha siga viva depende de nosotros, los verdugos deben
entender que como dice la canción: no nos han vencido !!!.
Martin Ravazzano
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